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Las 3 de Netflix

Studio Ghibli

Fundado en 1985, es uno de los estudios de animación más importantes del mundo. Sus creadores son los directores Isao Takahata y Hayao Miyazaki. Este último es director, dibujante y potencia creativa del estudio, referente indiscutido que, con su estilo y poética, es inmediatamente reconocible en el universo cinéfilo y para el púbico adulto e infantil. Habiéndose ganado un lugar singular en el mundo del cine, es reconocido como inspiración por realizadores como Guillermo del Toro, Steven Spielberg y Wes Anderson, entre otros.

Cuando el artista y productor anuncio su retiro en 2013 (y recibió un Oscar honorífico por su carrera en el mismo año), el estudio, poco tiempo después, anunció su cierre. Sin embargo, Miyazaki volvió para una última película y Ghibli reanudó su producción en el 2017.

Ha compartido cómo es su método de trabajo, el guión de sus películas se va construyendo a través del diseño de las imágenes, y no al revés.  “Nunca sabemos a dónde irá la historia, pero seguimos trabajando en la película a medida que se desarrolla”. A la vez, la estética característica de sus films se basa en métodos de animación más artesanales, dado que el dibujo de cada cuadro es a mano, más cercano al 2D que a lo tridimensional. Las imágenes digitales se fueron incorporando poco a poco, a partir del célebre La princesa Mononoke, pero siempre como enriquecimiento de la construcción final, nunca como reemplazo del trazo a mano. Por ello también se realizaron, a lo largo de su extensa carrera, diferentes exposiciones alrededor del mundo de sus diseños, dado que, como en el caso del director estadounidense Tim Burton, su animación dialoga con sus dibujos e imaginarios personales. Entre las retrospectivas por su filmografía, podemos mencionar la de sala de Cine Amigos del Museo de Bellas Artes que tuvo lugar en julio 2015.

Su poética, según él mismo declaró, posee además de sus universos únicos, influencias de los creadores del manga (mangakas) Osamu Tezuka, Sanpei Shirato, Soji Yamakawa, e Isao Takahata y también ha manifestado la influencia que tuvo para él un director emblemático del cine japonés y de los más conocidos en occidente como es Akira Kurosawa. El estudio mismo se ha transformado en un espacio de exhibición que puede visitarse en las afueras de Tokio a partir de 2017. El 3 de junio de 2020, se anunció oficialmente el lanzamiento de Earwig y la bruja (2020, disponible en Netflix), la primera película en animación del estudio realizada por computadora por el hijo del creador, Goro Miyazaki.

En Netflix Latinoamérica están disponibles, entre otras muchas otras obras de animación, algunas de las películas más emblemáticas de Ghibli:

Nausicaa del valle del viento (1984):  Su éxito en Japón permitió la creación del Studio Ghibli. Distopía en un mundo post-nuclear, su impactante vigencia reúne, como es habitual en las obras de este director, las tradiciones, el amor a la naturaleza, el anhelo pacifista, y un personaje femenino como la princesa Nausicaa que lucha contra los particulares seres llamados Ohms.

 

Mi vecino Totoro (1988): Totoro es el rey del bosque, criatura entrañable que se volvió la mascota del estudio y es el fiel compañero de dos niñas que tienen a su mamá en el hospital. Otra de las importantes, compone también un ícono del corpus.

 

La princesa Mononoke (1998): Recibió el premio de mejor película en la Academia de cine japonesa, y la fuerza de la naturaleza toma forma aquí en el propio cuerpo de esta princesa que es una niña loba. Nuevamente lo humano, y su capacidad de construir y destruir, es puesto en tensión respecto al mundo natural.

 

El viaje de Chihiro (2001) es una de las películas más importantes de Ghibli, y un gran éxito de taquilla y crítica.  Recibió el  Oso de Oro en la Berlinale 2002, y fue la primera de su factoría la nominación el Oscar a la mejor cinta animada en 2002  e implicó el reconocimiento a la trayectoria del director en el Festival Internacional de Cine de Venecia. Un mundo mágico explorado por Chihiro, una Alicia en el país de las maravillas, llena de implicancias dentro de la tradición japonesa pero que la trasciende, un relato sobre la identidad, la experiencia y la memoria. Ni más ni menos. Se basa en una novela de Sachiko Kashiwaba que no está traducida al castellano y significa Un pueblo misterioso más allá de la niebla. 

El castillo ambulante/ El increíble castillo ambulante en Netflix. (2004)

Se pone en escena el universo del libro homónimo de Diana Wynne Jones, considerado un clásico del fantástico contemporáneo. Fue estrenada en el Festival de cine de Venecia, donde recibió un premio, entre otros y fue nominada al Oscar. El paso del tiempo, el marco de la Guerra de Irak, van enhebrando este relato atravesado por el pacifismo y el paso del tiempo. Aquí también la protagonista recorrerá numerosas experiencias mágicas y un hechizo que serán un camino de aprendizaje y una mirada crítica sobre el mundo que habitamos.

El viento se levanta (2013)

El protagonista de esta historia es un hombre, un personaje real, el ingeniero aeronáutico Jirō Horikoshi, quien diseño, entre otros, el avión de combate Zero, que fue utilizado en el ataque aéreo a Pearl Harbor durante la Segunda Guerra Mundial, lo que dio lugar a la entrada en combate de los EEUU. El interés de Miyazaki por el universo aeronáutico viene de su infancia, dado que su padre realizaba timones para aviones de guerra. La narración se va atravesando distintos momentos de la vida de Horikoshi, y a través de ella se realiza un recorrido por la historia y los cambios en Japón. Se basa libremente en la novela corta El viento se alza de Tatsuo Hori, de 1937. El título juega con el verso del poeta francés Paul Valéry: “El viento se levanta, debemos intentar vivir.” En términos ideológicos, la película recibió críticas desde distintos sectores por el tratamiento a los aspectos belicistas (si bien Miyazaki se define como pacifista) de la historia del país. Fue también nominada al Oscar.

Se encuentran también en el catálogo de Netflix: Kiki, entregas a domicilio (1989) y Ponyo y la sirenita (2003).

Isao Takahata, el socio de Miyazaki, es además de productor de algunos de los films, director de la fundamental del género La tumba de las luciérnagas (1988), lamentablemente no disponible en Netflix. Las creaciones de este director que sí lo están son: Recuerdos del ayer (1991), La guerra de los mapaches (1994), Mis vecinos los Yamada, (1999) y El cuento de la princesa Kaguya (2013), basada en un cuento popular japonés.

Teaser El viaje de Chihiro.

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